La demanda de casas de playa centra su atención en la zona conformada por la franja costera entre San Antonio y Cerro Azul, que abarca San Antonio, Mala, Asia y Cerro Azul. Entre ellos, el balneario de Asia continúa a la vanguardia de este tipo de urbanizaciones de playa. Sin embargo, existen proyectos para elegir desde el kilómetro 40 hasta el 135 de la Panamericana Sur.
Saettone García explica que la preferencia por vivir cerca de las playas del sur se debe a la cercanía con Lima, a diferencia de las del norte, donde se debe cruzar el tramo de la carretera Panamericana Norte denominado Pasamayo para llegar a las playas ubicadas en Huaral, Huaura y Barranca. Manifiesta que un importante proyecto se ejecuta en el kilómetro 240 de la Panamericana Sur
Víctor Saldaña señala que los aficionados a la práctica de surf prefieren adquirir inmuebles cerca de las playas como Señoritas, Caballeros, Punta Rocas y San Bartolo. Por esta razón, algunos balnearios se convirtieron en residenciales, como Santa María y La Quebrada. En el norte del país, las zonas preferidas son Máncora y Punta Sal.
Los precios de una casa de playa varían en un rango amplio, ya que se pueden encontrar inmuebles desde US$ 120 mil hasta cerca de US$ 1 millón. El precio puede variar según la ubicación, por ejemplo, si está frente al mar. También influye la amplitud, el diseño arquitectónico y la calidad de los acabados. En promedio, las casas de playa en el balneario de Asia superan los US$ 350 mil y el alquiler, los US$ 15 mil para toda la temporada de verano.
Algunas personas compran más de un lote con el propósito de contar con una mayor área de terreno. Así, tienen la alternativa de construir una casa más amplia. Por otro lado, quienes demandan estos inmuebles pertenecen normalmente a los sectores socioeconómicos A y B, y en su mayoría se trata de profesionales o empresarios que ya cuentan con una propiedad en la ciudad.
DIVERSAS OPCIONES
Debido a que las casas de playa son un inmueble de segundo uso, las personas optan por un crédito hipotecario para adquirirlos. Las entidades financieras ofrecen diversas modalidades de producto y, por lo general, el porcentaje de la cuota inicial es superior al que se considera para la compra de un inmueble en la ciudad, y el número de años por el que se otorga el crédito es menor.
La estabilidad económica del país, sumada al mayor acceso crediticio de las personas naturales, generó que las casas de playa no solo se conviertan en una señal de prosperidad económica, sino también en una fuente de renta si son alquiladas. El dinamismo de este mercado se refleja en los proyectos que finalizarán en diciembre.
A fin de año se inaugurarán las obras realizadas en el complejo Asia del Mar, en la playa Sarapampa, con más de cien casas de playa. Posteriormente, serán entregadas más de 170 viviendas en la segunda etapa de la playa el Golf, ambos en el distrito de Asia. De esta manera, la inversión inmobiliaria continua y según los especialistas se incrementará en 25% en los próximos años.
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